Mejores cremas para tomar el sol de forma segura
En SunQuiet nos preocupa la salud de tu piel y por esta razón, queremos ayudarte a elegir las mejores cremas para tomar el sol. Así, sabrás cómo protegerte ahora que llega el buen tiempo y, con él, los deportes al aire libre y las salidas al campo, a la playa o a la montaña.
La importancia de proteger la piel
El sol puede ser muy beneficioso para nuestra salud pero también ocasionarnos daños como quemaduras, envejecimiento, hiperpigmentación, alergias o alteraciones del ADN que, en algunos casos, pueden provocar la aparición de lesiones cancerígenas (melanomas).
Estos síntomas y su gravedad dependen de muchos factores, entre ellos el fototipo de cada persona (determinado por la cantidad de melanina que producimos) o el índice de UV del lugar en el que nos encontramos. Por ejemplo, los fototipos más claros y los índices UV altos siempre necesitan una mayor protección.
En cualquier caso, preservar la salud de la piel es importante ya que se trata de nuestro órgano de defensa más grande. Aún así, elegir las mejores cremas para tomar el sol no siempre es sencillo. En el mercado existen muchos productos de diferentes marcas y cada uno tiene unas características y efectividad diferente.
El objetivo de todas ella debe ser garantizar la protección de nuestra piel. Para ello deben cumplir las siguientes características:
- Ser eficaces contra los rayos UVA y UVB.
- Contener radicales libres para prevenir lesiones cancerígenas cutáneas, alteraciones en el ADN y envejecimiento de la piel (fotoenvejecimiento).
- Tener bajo contenido en siliconas.
- Ser resistente al agua.
- Ser fáciles de extender.
- Ser fotoestables (que no pierda eficacia con la exposición prolongada a la luz).
- No provocar alergias ni irritaciones.
Tipos de cremas para tomar el sol
En primer lugar, podemos distinguir entre los protectores y los bloqueadores solares. La diferencia está en su composición. Los primeros tienen sustancias orgánicas que brindan protección contra la exposición a la radiación ultravioleta mientras que los segundos, tienen componentes inorgánicos que la piel no absorbe y que “bloquean” la penetración de los rayos UVB y UVA.
Todos los protectores solares deben indicar en su envase la composición cualitativa y cuantitativa de los filtros y bloqueadores que contienen. Esta información es útil para reconocer las mejores cremas para tomar el sol. En general, se recomiendan cremas de alto espectro, es decir, que protejan de todo tipo de radiaciones.
Otra característica importante que nos indica la calidad y eficiencia de una crema para tomar el sol es el “factor de protección solar”. Conocido como SPF, este número nos indica el tiempo que estaremos protegidos de quemaduras solares si nos aplicamos una crema comparándolo con ese mismo tiempo sin aplicarnos protección. El SPF de las cremas para tomar el sol cubre un espectro muy amplio. La protección mínima es de 2 a 11, mientras que la máxima es el factor SPF 20-30. Su efectividad está probada y avalada: un factor 5 absorbe más del 92% de la radiación mientras uno 30 protege hasta un 97%.
En este sentido, tenemos que destacar que un factor SPF más alto no siempre es sinónimo de mejores cremas para tomar el sol, aunque sí que indica que la exposición solar, en tiempo, puede ser de mayor tiempo. El consejo general es adaptar el SPF en función de si las zonas del cuerpo es más o menos sensibles a la radiación: por ejemplo, la cara requiere un factor SPF más alto.
Consejos de aplicación
Para que sean efectivas, incluso las mejores cremas para tomar el sol deben ser aplicadas bajo unos criterios. La recomendación es extender una cantidad generosa de la crema (alrededor de 35 ml.), 30 minutos antes de la exposición al sol y renovar dicha aplicación cada dos horas.
También debemos tener muy en cuenta las actividades que realicemos. Por ejemplo, los fotoprotectores catalogados como water ressistant protegen bajo el agua pero pueden perder más del 70% de su valor SPF después de varios baños una vez la piel está seca. Es decir, que tras unos 40 minutos de inmersión, la crema pierde su capacidad de protección.
Por último, las personas que realizan deporte pueden buscar cremas y protectores para tomar el sol swatproof (resistentes al sudor), mientras que en los niños se recomiendan las cremas rubproof (protección a los roces) para evitar rozaduras con la arena, el césped o con algunos juguetes.
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