Quemaduras por el sol: cómo acabar con ellas
A la mayoría de las personas nos gusta presumir de una piel morena y bronceada durante el verano. Y por lo general, esto se traduce en un aspecto saludable a la vez que parece que nos hace parecer más atractivos, estéticamente hablando. Sin embargo, hoy en día sabemos que a la hora de exponernos al sol es imprescindible tomar precauciones para preservar nuestra piel y salud.
En este artículo de SunQuiet te explicamos cómo evitar quemaduras por el sol, y así no tener que preocuparte por los remedios de quemaduras de sol.
Errores habituales en la protección solar
A pesar de las numerosas campañas de prevención y la abundante información al respecto, no falta quien llega a pensar que en pleno verano si está nublado no es necesario utilizar protección solar, por ejemplo. Y este, entre otros, es un grave error que podría ocasionar importantes quemaduras por el sol, como las que se registran cada temporada veraniega.
La causa más común por la que se contrae una quemadura de piel es debido a una intoxicación solar. Es decir, a una excesiva exposición a radiación UV, UVB y UVA.
Las quemaduras por el sol van de leves a graves. Aunque todas comienzan igual: con un enrojecimiento de la piel que puede ocasionar escozor, dolor, irritación, ampollas, e incluso deshidratación y fiebre. Estos últimos síntomas pasadas 6-12 horas desde la exposición.
En algún momento de nuestra vida seguramente hayamos pasado por algunas quemaduras por el sol. No obstante, evitarlas ha de ser tu prioridad este verano. Y es que las quemaduras, en el peor de los casos, podría ser la causante de cáncer en la piel en el futuro.
Tipos de quemaduras por el sol
Todas las personas estamos expuestas a las quemaduras del sol si no tomamos precauciones. No obstante, hay ciertos perfiles que, por sus condiciones, son más vulnerables a los rayos del sol. Entre ellos:
- Personas con la piel o tez clara.
- Cabello rubio o rojizo.
- Ojos claros.
Es importante que siempre que vayamos a estar expuestos al sol tengamos claras las precauciones o, de lo contrario, podrían aparecer diferentes tipos de quemaduras en nuestro cuerpo.
Quemaduras de sol leves
La piel se enrojece y suelen sentirse molestias al roce con la ropa o al tacto. Se puede irritar y tras unos días comenzará a pelarse para renovar las células muertas.
En estos casos basta con aplicar remedios de quemaduras por el sol como darse una ducha fría y, posteriormente, untar la zona varias veces al día una aftersun.
Es muy importante mantenerse bien hidratado y no exponerse nuevamente al sol hasta estar totalmente recuperado.
Quemaduras de sol moderadas
Este tipo presenta dolor al tacto, enrojecimiento y, en ocasiones, también hinchazón y un malestar generalizado en el que la sensación térmica puede sufrir alteraciones (calor y frío). En estos casos, la piel tarda más en curarse, ya que se pela, se cae y se recompone.
El tratamiento es el mismo que para quemaduras por el sol leves. No obstante, estas requerirán de un periodo de recuperación más largo.
Quemaduras de piel graves
Cuando las quemaduras por el sol son graves, además de los síntomas anteriores, pueden presentarse náuseas, vómitos, escalofríos, dolor de cabeza, estado gripal y fiebre. En algunos casos, incluso infección; por lo que ante quemaduras consideradas graves siempre es aconsejable recurrir al médico.
Cómo evitar las quemaduras por el sol
Saber cómo aliviar las quemaduras del sol es importante, pero más aún lo es evitarlas.
Existen factores determinantes que pueden considerarse como de mayor riesgo. No obstante, a la hora de prevenir las quemaduras por exposición al sol, existen una serie de pautas básicas:
- Evita exponerte al sol a las horas de mayor riesgo (entre las 10 y de 16 horas).
- Aplica el protector solar media hora antes de la exposición al sol y repítelo cada dos horas si se está en contacto con el agua. Aunque el día esté nublado deberás realizar esta acción.
- Utiliza otros métodos de protección solar: como gafas anti rayos UVA y UVB, sombreros, entre otros.
- Descarga SunQuiet. La aplicación te ayuda a cuidar la piel y mantenerla saludable frente al sol.
- Usa ropa de color clara. Siempre es mejor a la hora de salir a caminar bajo el sol, ya que los tonos oscuros absorben el calor y los rayos con mayor rapidez.
- Evitar beber alcohol antes y durante la exposición al sol
Siguiendo estos consejos podrás lucir una piel sana y bronceada todo el verano sin que se vea afectada por las quemaduras por el sol. Tu salud mejorará y disfrutarás del verano como nunca lo has hecho.