Factores de riesgo para padecer un cáncer de piel
El factor principal para padecer un cáncer de piel, tanto melanoma como cáncer de piel no-melanoma, es la exposición a la radiación ultravioleta (UV). Esta fuente de energía puede proceder tanto de los rayos solares como de las fuentes artificiales como son las cabinas de bronceado.
El riesgo a padecer un cáncer de piel será más alto cuanto mayor sea exposición a estas fuentes de luz que se van acumulando a lo largo de nuestra vida. Por otro lado, el riesgo será también dependiente de la latitud geográfica donde se vive, pues la cantidad de UV es mayor y constante durante todo el año en áreas cercanas al ecuador. Lo mismo con las actividades que realicemos al aire libre sin protección.
Otro de los factores que debemos considerar son las exposiciones intensas al sol a edades tempranas, especialmente si llegaron a producir quemaduras solares en la infancia.
Todo lo dicho indica que hay factores que podemos controlar para disminuir las posibilidades de padecer un cáncer de piel. Lo principal es la realización de un examen periódico de la piel, lo que conseguirá que las lesiones sean tratadas en sus fases de inicio cuando son absolutamente curadas con una pequeña intervención.
A la hora de recurrir a estos exámenes, has de tener en cuenta una serie de factores. Ya que hay ciertos factores de riesgo para padecer un cáncer de piel en base a diversos aspectos.
Factores generales
- La edad. El riesgo de cáncer de piel aumenta con la edad, ya que normalmente está asociado a una mayor cantidad de exposición acumulada a rayos UV. Pero el cáncer de piel también aparece en personas de piel clara que han pasado mucho tiempo expuestos a los rayos UV; especialmente si han tenido quemaduras en la infancia.
- Sexo. Los hombres tienen el doble de riesgo de desarrollar un carcinoma basocelular que las mujeres; y tres veces más para desarrollar un carcinoma epidermoide.
- Inmunosupresión. Las enfermedades víricas y las enfermedades o tratamientos que conllevan una disminución de la inmunidad, como los trasplantados, son más propensos a padecer un cáncer de piel.
Factores individuales
Fototipo o tono de piel. Las personas de piel clara o fototipos I, II cuya tendencia es a mayor propensión a quemarse y a desarrollar pecas, tienen un riesgo mayor que los tonos oscuros IV y V.
Nevus o lunares. Los lunares son lesiones benignas y muy raramente se convierten en cánceres de piel. Si el número de nevus que se tienen es mayor de 50 el riesgo de que alguno se malignice es mayor que en los pacientes con escaso número. Alguno de los nevus puede tener unas características anormales o displásicas (asimetría, varios colores, crecimiento etc), y estos pueden aumentar un 10% las posibilidades de tener un melanoma. Los pacientes con nevus displásicos deben de seguir un examen periódico de su piel.
Factores genéticos
Enfermedades genéticas. Enfermedades congénitas como el xeroderma pigmentosum, cuya anomalía consiste en tener un defecto en la reparación fisiológica de las alteraciones que ocasionan los rayos UV en la piel, lo que ocasiona la aparición a edades muy tempranas de cánceres de piel. También los que desarrollan el síndrome del Nevus Basocelular o síndrome de Gorlin.
Historia familiar o personal de cáncer de piel. El tener familiares cercanos con cáncer de piel proporciona tener un mayor riesgo personal de tener un cáncer de piel, y también si una persona ha tenido un cáncer de piel le da más posibilidades de padecer otro en el futuro.
Factores relacionados con el estilo de vida
Tabaco. Los fumadores tiene un mayor riesgo de tener cáncer epidermoide de labio.
Contacto con sustancias químicas. Tener contacto con ciertos productos como arsénico, alquitranes, parafinas, algunos aceites etc. puede causar el desarrollo de carcinomas cutáneos.
Exposiciones a los rayos UV. Las personas que trabajan al aire libre, o que toman el sol todo el año sin protección tienen un mayor riesgo de presentar un cáncer de piel. También los que por motivos cosméticos han utilizado los rayos UV de bronceado.
Otros factores
Virus. Las infecciones por el virus del papiloma humano, especialmente en localizaciones como perianal, o área genital, son factores que aumentan el riesgo de tener un carcinoma epidermoide. Las infecciones por el virus del herpes tipo 8 pueden asociarse al desarrollo del Sarcoma de Kaposi, así como pacientes infectados del virus HIV.
Tratamientos. Tratamientos mediante radiaciones ionizantes o exposiciones a los rayos UV con fotosensibilizantes (PUVA) para el psoriasis puede aumentar el riesgo a largo plazo de tener un cáncer de piel.
Ahora que ya conoces los factores de riesgos para padecer un cáncer de piel es momento de empezar a tenerlos en cuenta para evitar el desarrollo de éste.